Es uno de los grandes cineastas contemporáneos, pero sigue en actividades sin grandes facilidades para ello. Brian De Palma cuenta en su trayectoria títulos como Vestida para matar, Doble de cuerpo, Los intocables o Atrapado por su pasado, y sin embargo durante las últimas dos décadas su carrera parece inmersa en un extraño declive. Luego de La dalia negra, De Palma se ha visto obligado a recalar en bajos presupuestos con muy pocas opciones de llegar al gran público, hasta el punto de que entre Passion y Domino, su última película hasta la fecha, transcurrieron 7 años. Por si fuera poco, Domino (protagonizada por Nikolaj Coster-Waldau) atravesó todo tipo de dificultades, culminadas con una dura recepción por parte de la crítica.
Aún así De Palma está empeñado en seguir trabajando, y tres años después concreta su siguiente proyecto, según World of Reel. Su título es Sweet Vengeance y se inspira en “dos historias reales de asesinatos” de Estados Unidos. Por algún motivo, sin embargo, De Palma tiene previsto rodar la película en Montevideo (Uruguay), existiendo una sólida posibilidad de que el idioma del film no sea el inglés, sino otro (probablemente el español). Sweet Vengeance nace, por otro lado, de la explosión que el género true crime ha experimentado en los últimos años, luego de que el director de El precio del poder haya visto varios exponentes del mismo, desde documentales hasta series que recreaban hechos reales.
El true crime, sin ir más lejos, ha contado con un nuevo exponente en la fiebre desatada por Dahmer, serie creada por Ryan Murphy y protagonizada por Evan Peters. Netflix estrenó este proyecto sin apenas publicidad, y sin embargo el morbo del personaje (ayudado de sucesivas controversias en redes sociales) ha logrado que la serie escale a lo más alto en el ránking de la plataforma de streaming. Sweet Vengeance, aún sin reparto confirmado, no es el único proyecto al que De Palma le está dando vueltas hoy día, pues lleva tiempo con la idea de desarrollar una película centrada en Harvey Weinstein. Esta, de momento, se encuentra en el limbo de la preproducción.