El ministro de Trabajo, Jorge Triaca, aseguró que “en muchas cosas” el sindicalismo atrasa porque hay gremialistas que “todavía sintonizan en blanco y negro”.
El ministro afirmó que “hay algunos sectores que están muy entrampados en la discusión electoral; se juntan para la foto, se juntan con algunos dirigentes, le preguntan si tienen que hacer una movilización o no a Cristina“.
Asimismo, reiteró que “no existe ningún proyecto” de reforma laboral, y ratificó que en esa cuestión “cualquier cambio que se realice será con el consenso del sector trabajador y del empresario”, aunque señaló que “sí existen temas que debemos abordar y que venimos dialogando con los dirigentes de la CGT, como el blanqueo laboral, la formación profesional”.
En una entrevista publica en Clarín, Triaca admitió que en materia de empleo “hay sectores que todavía tienen dificultad” como la industria del calzado y la textil, y sostuvo que “más allá de eso, hay más de 4 millones y medio de trabajadores en la informalidad” y “para resolverlo tenemos que resolver muchos problemas del ámbito del trabajo, como la industria del juicio mal habida”.
En ese marco, destacó: “Cuando vemos que 58 mil demandas pasaron a 125 mil en menos de 5 años, mientras caía la cantidad de accidentes de trabajo, vemos ahí una acción que tenía que ver con una conducta mafiosa, desde abogados, peritos y muchas veces hasta jueces, por suerte son minorías, pero este Gobierno lo puso en la mesa”.
Consultado sobre si el sindicalismo atrasa, el ministro aseveró que “en muchas cosas sí”. “Cuando veo que muchos se guían por convenios escritos en la década del 70 y que no adecuan sus convenios o formas de producción a la realidad tecnológica, del conocimiento y de los procesos productivos que tiene la Argentina hoy, sin duda hay muchos que todavía sintonizan en blanco y negro“.
En contraposición, sostuvo que “muchos empiezan a entender que el mundo ha cambiado, está lleno de oportunidades, y hay que trabajar sobre ellas a través de más conocimiento, mejorar el acceso de los trabajadores, sobre todo de los más jóvenes, al ámbito del trabajo. Ese debate está abierto y es parte de la propuesta que le hace este Gobierno a toda la dirigencia sindical, empresaria y social”.
Sobre la posibilidad de que la CGT cuando se reúna el 25 de setiembre resuelva convocar a un paro, evaluó que “hoy, con un Gobierno que tiene predisposición para la negociación, es absolutamente innecesario y quizás también inoportuno”. “En un momento donde la economía y el empleo empiezan a recuperarse, hablar de paro me parece que no tiene sentido lógico. Me parece que eso lo que hace es desconectar a muchos dirigentes del vínculo con sus representados. No significa que no tengamos materias pendientes o que no haya sectores que tengan dificultad”, concluyó.
(DyN)