El Comité Conjunto de Vacunación e Inmunización británico (JCVI) anunció hoy que recomienda no administrar las vacunas contra el coronavirus de forma masiva para personas sanas de entre 12 y 15 años, tal como pretendía el Gobierno.
La decisión del grupo se basó en la preocupación por un efecto secundario extremadamente raro vinculado a una inflamación del corazón que provoca el fármaco de Pfizer.
Como los niños y jóvenes sin comorbilidades suelen presentar casos leves al contraer el virus, se decidió que la vacunación ofrecería un “beneficio marginal” y que, por lo tanto, no había pruebas “suficientes” para ofrecer una campaña masiva.
“Para la gran mayoría de los niños, la infección por SARS-CoV-2 es asintomática o levemente sintomática y se resuelve sin tratamiento. De los pocos niños de 12 a 15 años que requieren hospitalización, la mayoría tiene problemas de salud preexistentes”, dijo el comité en un comunicado.
El organismo en cambio, optó por un enfoque más preventivo con el objetivo de evaluar los impactos a largo plazo de ese efecto secundario.
Por el contrario, Wei Shen Lim, presidente de Inmunización Covid-19 del JCVI, reiteró que “a los niños de 12 a 15 años de edad con afecciones de salud preexistentes que los pone en mayor riesgo contraer un coronavirus grave se les debe ofrecer la vacuna”.
“Para los sanos su riesgo de enfermedad grave es bajo y, por lo tanto, el potencial de beneficio de la vacunación también es baja”, explicó.
Tras la publicación de esta recomendación, el ministro de Sanidad, Sajid Javid, afirmó que pedirá la opinión de las autoridades médicas de las cuatro naciones que forman el Reino Unido “antes de tomar rápidamente una decisión”.
Las vacunas de Pfizer y Moderna para los mayores de 12 años fueron aprobadas por la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios (MHRA), tras haber cumplido estrictas normas de seguridad y eficacia.
La semana pasada el Departamento de Salud y Atención Social (DHSC) había confirmado que se estaban realizando los preparativos para garantizar que el NHS, como se conoce al sistema público de salud de Inglaterra, estuviera listo para ofrecer inoculantes a todos los niños de 12 a 15 años desde principios de septiembre.
Según una investigación dirigida por el University College London y el departamento de salud de Inglaterra conocido como Public Health England, hasta uno de cada siete niños que contraen coronavirus podrían tener síntomas casi cuatro meses después.
Las personas que dieron positivo tenían el doble de probabilidades de informar tres o más síntomas 15 semanas después que las que dieron negativo, sugirió el estudio. (Télam)