El titular de la UOCRA La Plata Juan Pablo “Pata” Medina abandonó esta tarde la sede del gremio, en medio de un operativo para desalojar a los manifestantes que se encontraban respaldando al referente gremial. Medina se encontraba “atrincherado” en la sede de la avenida 44 entre 4 y 5 de La Plata, luego de conocerse una denuncia judicial por extorsión, y ya abandonó el lugar fuertemente custodiado.
“Si quieren al ‘Pata’ preso, vengan”, advirtió Medina tras un efusivo discurso que brindó esta tarde desde el balcón de la sede gremial ante miles de afiliados que se autoconvocaron anoche en las puertas del edificio ubicado en la avenida 44 entre 4 y 5 de La Plata. En su arenga, Medina acusó por la denuncia de extorsión al gobierno nacional: “Un presidente democrático da la orden a su gabinete nacional para investigarme sin fundamentos”, expresó.
“Ellos vienen por todo, no vienen únicamente por el ‘Pata’ Medina sino por todos los dirigentes del movimiento obrero”, afirmó el sindicalista platense y advirtió que en el gobierno “están preparados para reprimir”. “A todos los políticos que piensen, porque no quiero uno, dos o tres Santiago Maldonado más”, pidó Medina.
“Nuestros trabajadores están preocupados porque está claro que quieren destruir al movimiento obrero y sacarles conquistas”, expresó el líder sindical, ante sus seguidores. Además, consideró a la denuncia en su contra como “un atropello al movimiento obrero y a los trabajadores constructores”.
Desde el balcón, el dirigente gremial le pidió a sus afiliados que la protesta sea “pacífica”. Los manifestantes en la calle, mientras tanto, cargaban bombas molotov y juntaban piedras.
El conflicto que involucra a Medina estalló ayer a la tarde cuando se conoció que la fiscal federal de Quilmes, Silvia Cavallo, denunció por extorsión al líder de la seccional La Plata de la UOCRA por provocar retrasos en la reforma de la estación Pereyra del tren Roca.
La denuncia contra Medina se da dentro de una causa abierta tiempo atrás por la agrupación “Vecinos Autoconvocados de Hudson” que reclaman la adaptación y apertura de la estación Pereyra al servicio de trenes de pasajeros en su modalidad eléctrica.
Trascendió que esa disputa por quién se quedaba con los empleos de esa obra fue violenta, incluso algunas versiones sostienen que hubo disparos de armas de fuego; aunque esa situación fue desmentida por Medina, quien reconoció que “hubo un conflicto con los colegas de Varela”.
“El tema gremial está solucionado, porque dialogamos con nuestros compañeros de Varela en un marco institucional y quedamos en que será La Plata la que aporte los trabajadores”, dijo. Pero tras el acuerdo, surgió una denuncia en la que se acusó a la UOCRA La Plata de extorsionar a la empresa constructora Coninsa, aduciendo que los costos de las obras a realizar en dicha estación habían sido incrementados y que se debía incluir un gasto extraordinario.
Medina ya había encabezado la semana pasada otro incidente con la justicia, en este caso de La Plata, que le ordenó desalojar cinco obras que habían tomado trabajadores de la UOCRA por diferencias en los pagos realizados por inversores inmobiliarios.
(Con información de DyN)