El 37 por ciento de los “gamers” argentinos admitió que pasa entre 4 y 6 horas diarias frente a una pantalla de videojuegos y un 17 por ciento de ellos reconoce como “un vicio” el vínculo que mantiene con las diferentes plataformas, según una encuesta de la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires.
La cifra surge a partir de un estudio realizado por el Observatorio de Adicciones y Consumos Problemáticos, dependiente de la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Buenos Aires difundido hoy por el Diario Popular, al tiempo que debe agregarse otro 51 por ciento de usuarios que juega entre dos y tres horas diarias.
“Nos encontramos con que el 47 por ciento de los entrevistados reconoció que dejó de hacer distintas actividades para dedicarle más tiempo a los videojuegos”, explicó Walter Martello, defensor del Pueblo Adjunto y a cargo del Observatorio, que realizó unas 273 entrevistas presenciales con cuestionario y respuestas online, en las que participaron mujeres y hombres de entre 12 y 45 años.
Martello advirtió que el 17 por ciento de los consultados definió como “un vicio” el vínculo que mantienen con distintas plataformas, como consolas, tablets, smartphones, notebooks y computadoras de escritorio. De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) incluyó la adicción a los videojuegos dentro del listado de desórdenes mentales, en una categoría que está al mismo nivel que la ludopatía, es decir la acción de apostar compulsivamente.
Preocupación por el Fortnite
El especialista alertó sobre un videojuego que está de moda: el Fortnite. “Nos está generando mucha preocupación el impacto que está teniendo en la vida cotidiana de niños, niñas y adolescentes”.
Incluso, aseguró que puede derivar en problemas en las aulas: “En distintos establecimientos educativos, donde venimos realizando talleres, docentes nos han comentado de casos de alumnos que han bajado su rendimiento escolar porque van a clases prácticamente sin dormir producto de que se quedan jugando hasta la madrugada”.
Martello lamentó que, a diferencia de lo que ocurre en otros países como España, “la Argentina tiene una legislación poco abarcativa, desactualizada y totalmente insuficiente” en lo que se refiere a la regulación de videojuegos.
Es por eso que el Observatorio de Adicciones elaboró una guía informativa sobre consumo responsable, acompañada de un informe con una serie de propuestas, entre las que figura “incluir la adicción a los videojuegos en el Plan Estratégico Participativo Integral de Salud Mental y Adicciones de la provincia de Buenos Aires”. También, “revisar el sistema de Atención de las Adicciones (SAA), incluir un programa de prevención y capacitación vinculado con el uso indebido de videojuegos e incorporar específicamente en la Cartilla de Prestaciones del Instituto Obra Médico Asistencial (IOMA) la adicción a los videojuegos”.
(NA)