El pasaje en subte aumentó nuevamente 1 peso, por lo que el viaje pasó a costar $14,50, y seguirá aumentando a ese ritmo hasta llegar a los $16,50 en febrero.
Los aumentos mensuales se dan como respuesta a “múltiples factores, como la variación de la tarifa técnica y la necesidad de equiparar los valores de los diferentes medios de transporte y contribuir con la política de reducción de subsidios”, según había indicado la empresa Subterráneos de Buenos Aires (Sbase).
Ese ajuste se suma al de agosto, cuando había subido 66,7%, de $7,50 a $12,50, luego de que la Justicia porteña dejara sin efecto la medida cautelar que había frenado el último aumento dispuesto por el Gobierno de la Ciudad.
En la audiencia pública en la que Sbase había expuesto los motivos por los que se debían aplicar los incrementos, el presidente de la firma había argumentado que había “un entorno inflacionario”, por lo que había se necesitaba “acercar a la tarifa técnica”.